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El Ayuntamiento de Barcelona adquirió el Palacio en 1944, pero no fue hasta los años ochenta del pasado siglo veinte, cuando lo convirtió en la sede del Área Municipal de Cultura. Es un edificio con varios estilos mezclados, barroco en el exterior y un interior rococó, clásico y lleno de una suntuosa ornamentación. En la planta baja, antiguamente, se congregaban los llamados "amanuenses", personas que sabían escribir bien y que les escribían las cartas a las personas que no sabían hacerlo. Ahora, en la planta baja, hay una librería y una oficina de información cultural para los ciudadanos. |