Otra protagonista del otoño: la calabaza.
Hay una crema de calabaza muy sencilla y muy rica: pon en una cazuela una calabaza pelada y troceada, un puerro (lo blanco) troceado, una patata y una zanahoria -peladas y troceadas, claro- con un litro (o 1 y 1/2 l.) de caldo de carne (o de cubitos), hiérvelo 15 minutos, ponle sal y pásalo por el vaso batidor. Verás qué buena.