Podemos encontrar chamanes en varios puntos de la plaza del Zócalo, normalmente ataviados con ropa que nos recuerda antíguas vestimentas indígenas rituales. Suelen llevar una especie de taparrabos, camisa, collares y amuletos colgados, una bolsa que suele contener piedras-amuleto que suelen dar a quienes requieren sus servicios, así como una máscara con penacho de grandes plumas, en la cabeza.